La espera ha terminado y este pasado martes, la cadena de cable AMC estrenó por fin la tercera temporada de su serie más tecnológica, “Halt and Catch Fire”. Lo hizo casi tres meses después de su fecha habitual de estreno a principios de verano, pero la espera ha merecido la pena ya que a cambio nos ha dado un episodio doble con mucho que analizar. Vamos a repasar a continuación dónde dejamos las cosas tras el final de la segunda temporada y las primeras impresiones de esta recién estrenada tercera.
(A partir de aquí, spoilers hasta el inicio de la tercera temporada de “Halt and Catch Fire”)
Conviene recordar que el final de la segunda temporada nos dejó a todos los miembros del equipo Mutiny a bordo de un avión con destino San Francisco con el objetivo de relanzar su pequeña empresa. No olvidemos que a pesar de que inicialmente su idea era el mundo de los videojuegos online, acababan de descubrir el filón de los chats online y las comunidades digitales. Pero todos ellos llevan consigo una pesada mochila que hace que su futuro penda de un hilo. Por un lado, el matrimonio entre Donna y Gordon está en la cuerda floja. Ella ha abortado sin decirle nada a su marido y él ha tenido un affaire. Pero a pesar de todo, deciden seguir juntos y se toman este cambio de ciudad como una nueva oportunidad de salvar su vida sentimental. Y por otro, tenemos a Cameron que a pesar de su caparazón de mujer fría e independiente, no puede evitar sentirse decepcionada después de que Tom, el compañero de Mutiny con el que estaba saliendo decidiera no aceptar la oferta de mudarse a San Francisco con ella y el resto del equipo.
Y si repasamos la situación sentimental de los protagonistas, no podemos olvidarnos de Joe McMillian. Y es que en la segunda temporada vivimos el auge y caída de su matrimonio con Sara. Presenciamos como esos primeros momentos de amor y pasión se iban al traste después de que él arruinase la empresa de su suegro con un virus creado por la propia Cameron. En el ultimo episodio, ya separado, vemos como se anticipa a Mutiny y llega a San Francisco también con el objetivo de vender su idea y lanzar su startup al mercado.
Si bien “Halt and Catch Fire” siempre ha sido una serie muy interesante, no fue hasta su segunda temporada cuando realmente se convirtió en una auténtica joya. ¿Y qué propició este cambio? Pues algo tan sencillo como ceder el protagonismo de las tramas a sus dos personajes femeninos. Bien es cierto que Cameron (francamente uno de los mejores personajes femeninos de la televisión actual) ya gozó de grandes momentos en los primeros diez capítulos, pero fue su inesperada alianza con esa gran secundaria que era Donna lo que hizo realmente interesante el seguimiento semanal de la serie desde el punto de vista de una pequeña empresa liderada por dos mujeres a mediados de los 80.
Y parece que esta tercera temporada tampoco va a dejar pasar la oportunidad de hacer brillar a sus dos personajes femeninos. De momento ya las hemos visto luchar contra financieros que no quieren apostar su dinero en un negocio tecnológico controlado por mujeres. Y también han tenido que ver como muchos de estos empresarios aprovechan su ingenuidad para intentar aprovecharse de ellas con proposiciones de dudosa moralidad. Todo ello mientras el pobre Gordon se encarga de las tareas de mantenimiento de Mutiny alejado de la posición de poder de la que gozó en la primera temporada y a la sombra de una esposa que parece llevar ahora las riendas del negocio y de la familia. Pero este no parece haber abandonado la idea de hacer valer sus conocimientos tecnológicos y aprovecha cada ocasión para intentar hacer algo productivo con su vida más allá de arreglar ordenadores.
Además, como vemos en el segundo episodio, parece que la sombra de Joe es demasiado alargada y el recuerdo de aquella etapa que ambos compartieron en la primera temporada aún pesa demasiado en sus recuerdos. ¿Estarán Joe y Gordon condenados a trabajar juntos de nuevo? De momento ya hemos visto como Joe, centrado ahora en lanzar al mercado el primer antivirus para todos los públicos, contrata a Ryan tras la insistencia de este por formar parte de su equipo al sentirse menospreciado e infravalorado en Mutiny.
De momento estos dos episodios han servido para centrar a sus personajes en las que serán sus tramas en esta tercera temporada. Cameron y Donna luchando por sacar adelante su empresa, centrándose ahora en el intercambio y la compra-venta entre los usuarios de Mutiny y Joe con el objetivo de hacerse con el control del mercado de los antivirus. Quien parece que despierta más interés (e incógnitas) por ahora es el propio Gordon. Sabemos que su situación en Mutiny es insostenible y si a eso sumamos el “factor Joe”, la cosa apunta a un cambio radical de la situación.
Habrá que seguir de cerca “Halt and Catch Fire” para descubrirlo ya que si bien el primer episodio ha estado lleno de pequeños terremotos (algo común en la ciudad de San Francisco), parece que el verdadero seísmo está aún por llegar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario