Cuando se empezó a rumorear que FOX había llegado a un acuerdo con Antena 3 para dar continuación a “Vis a Vis”, no presté mucha atención a la rumorología. Al fin y al cabo, es mejor no hacerse ilusiones para evitar que el chasco sea más gordo. Pero no me las hice ni siquiera cuando se confirmó oficialmente la renovación, por lo que el estreno del primer episodio de esta tercera temporada ha sido como si el tiempo no hubiese pasado desde el final de la segunda y el reencuentro con las protagonistas me ha resultado tan placentero como cada uno de los episodios anteriores.
Pensábamos que nunca íbamos a saber si Zulema sobrevivía a coma en el que había quedado sumida tras el final de la segunda temporada. Creíamos que no íbamos a poder ver como Anabel tramaba su venganza tras perder todo el dinero que había acumulado con sus trapicheos en prisión. No contábamos con ver cómo se desarrollaba el embarazo de Saray y tampoco con ver cómo Macarena intentaba recuperarse tras perder a gran parte de su familia. Pero una vez más, “Vis a Vis” ha vuelto a demostrarnos que nos equivocábamos y casi dos años después del que era el final definitivo, hemos podido ver la continuación de todas estas historias (y alguna que otra nueva).