Las series españolas están de moda, y no sólo dentro de nuestras fronteras. “La Casa de Papel” se ha convertido en uno de los mayores fenómenos televisivos internacionales de los últimos tiempos y otras producciones españolas como “Gran Hotel”, “Merlí” o “Élite” han vivido días de gloria gracias a su presencia en plataformas digitales que permiten su visionado en cualquier parte del mundo. Para seguir con esa idea de éxito internacional, Netflix ha tirado de los lazos profesionales que ya mantiene con la productora Bambú para su nuevo y anunciado estreno, “Alta Mar”.
La acción de esta nueva serie nos traslada al Bárbara de Braganza, un lujoso transatlántico que en la década de los 40 parte de Vigo hacia Río de Janeiro en el que, entre otros muchos personajes, viajan las dos protagonistas, Eva y Carolina Villanueva, dos hermanas provenientes de una familia que amasó su fortuna en la industria del calzado y que tras la muerte de su padre emprenden el viaje con el objetivo de iniciar una nueva vida al otro lado del charco, una casándose con el dueño de la naviera y la otra buscándose la vida como escritora de novelas. En el viaje también las acompaña su tío, la mujer del servicio y su hija y un buen puñado de personajes más, entre pasajeros y tripulación.
El misterio comienza cuando poco antes de embarcar, una joven pide ayuda a las dos hermanas para escapar de un hombre que intenta matarla. Horas después, y tras haber introducido a la polizona en el barco dentro del baúl en que transportan sus ropas, la joven es arrojada por la borda. A partir de ahí se suceden una serie de misterios, muertes, sospechas, traiciones, villanos y falsos villanos en el que el espectador vivirá un Cluedo en primera persona con el objetivo de descubrir la verdad sobre esa joven y todo lo que rodea su escabrosa muerte. Y por supuesto, sin olvidarnos de la consabida historia de amor (marca de la casa) entre una de las hermanas y el primer oficial del barco.
El reparto está encabezado por Ivana Baquero (la niña de “El Laberinto del Fauno”) y Alejandra Onieva (a la que hemos visto en otras series como “Ella es tu Padre” o “Presunto Culpable”), que interpretan a las dos hermanas protagonistas. Acompañadas de rostros como el modelo Jon Kortajarena, Chiqui Fernández o Félix Gómez y por supuesto un buen puñado de caras que ya hemos visto en muchas de las producciones de Bambú como José Sacristán (que siempre aporta calidad en cualquier producción en la que actúe), Eloy Azorín, Manuela Vellés, Tamar Novas o Antonio Durán “Morris” (el épico Charlín de “Fariña”).
“Alta Mar” no es una mala serie, al menos bajo mi punto de vista. Está bien hecha, bien rodada, la fotografía y los escenarios son más que solventes y el diseño de producción está al nivel al que Bambú nos tiene acostumbrados. El problema es que ni ofrece nada nuevo, ni tampoco parece que lo intente. Es una serie más de las que la productora nos lleva ofreciendo años, que sigue el mismo esquema que “Gran Hotel”, “Velvet”, “Tiempos de Guerra” o “Las Chicas del Cable” y que denota una pasmosa falta de originalidad (habría que ver si esa falta de originalidad es culpa de una productora que no sabe evolucionar o de una plataforma de streaming que encarga exactamente lo que estamos viendo).
Y sí, es cierto que muchos espectadores echarán en falta ese “algo más” que convirtió “Fariña” en una de las mejores series españolas recientes, pero está claro que “Alta Mar” no engaña a nadie y ofrece exactamente lo que se nos vende, un culebrón de amoríos con tintes de misterio a lo Agatha Christie en el que los malos son muy malos y los buenos muy buenos. Un entretenimiento solvente que no entusiasma, pero que tampoco molesta y que ha hecho, en mi caso, los 50 minutos de trayecto en de casa al trabajo a las 8 de la mañana bastante más llevaderos, que no es poco.
A pesar de las críticas negativas que la serie está sufriendo por gran parte de la prensa especializada, la serie ya está apareciendo en muchas de las listas de las series más vistas y más maratoneadas en las últimas semanas, lo que viene a demostrar que, tras “Las Chicas del Cable”, la asociación entre Bambú y Netflix está dando los resultados esperados, al menos en cuanto a números de espectadores, que al fin y al cabo son los que pagan la suscripción.
“Alta Mar” ya ha sido renovada para una segunda temporada, o mejor dicho, ya se ha anunciado la emisión de los siguientes ocho episodios, ya que se rodaron dieciséis capítulos del tirón, argumento que Netflix utiliza como una supuesta renovación cuando en realidad no ha sido así. En cualquier caso, dentro de unos meses seguiremos con las aventuras del Bárbara de Braganza en su periplo hacia Brasil.
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