“La Casa de las Flores” se convirtió el año pasado en la serie revelación de la temporada. Gracias a su curiosa combinación de telenovela, comedia negra y relato costumbrista de una alicaída alta sociedad atrapó la atención de millones de espectadores alrededor del mundo. Netflix no dejó pasar la oportunidad y en seguida renovó la serie no sólo para una segunda temporada sino también para una tercera. Pues bien, esta mencionada segunda temporada ya está disponible en la plataforma y ya hemos podido descubrir las virtudes (pocas) y defectos (bastantes) de estos nuevos episodios.
La principal novedad de estos nuevos episodios es la marcha de Verónica Castro, que interpretaba a la matriarca de la familia, Virginia de la Mora. La ausencia en la serie de un personaje tan icónico interpretado por una no menos icónica diva, se antojaba demasiado relevante y la serie necesitaba un revulsivo con el que lograr mantener el interés del público. Y ese revulsivo vino de la mano de Paulina, su hija mayor. Manolo Caro, creador y guionista, decidió apostar todo al que fuera el personaje revelación de la temporada pasada y que ahora se ha convertido en el eje sobre el que gira todo el peso de la serie.